Si hay algo desagradable, que nos molesta y nos arruina, es una mancha. Piensa en tu prenda favorita, esa que amas y te queda perfecta! y de repente aparece con una mancha.
Existen muchas maneras de eliminarlas, dependiendo del tipo de sustancia que la provocó, y aquí te mostramos algunas:
Mancha de vino tino: Si te acabas de manchar, puedes probar frotando vino blanco. Otra opción, es realizar una mezcla de fécula de maíz y limón, la aplicas como si se tratase de un detergente.
Mancha de café: El bicarbonato de sodio también es útil para sacar las manchas de café o té. Humedeces con agua tibia la prenda manchada , viertes una cucharadita de bicarbonato de sodio sobre la mancha y frotas la tela. Deja que el bicarbonato actúe todo el tiempo que sea posible antes de enjuagarlo.
Mancha de sangre: Si la sangre es reciente, puedes limpiarla con agua oxigenada o agua con sal. Cuando la sangre está seca, existe un método más eficaz, la pasta de dientes. La aplicas sobre la mancha con un poco de agua formando una pasta, lo dejas secar. Posteriormente lo lavas con agua y jabón.
Mancha de grasa o aceite: Si está fresca puedes espolvorear bicarbonato, dejarla secar y luego cepillarla con agua y detergente. Si está seca, déjala remojar en agua con vinagre (2 partes de vinagre por 1 de agua).
Mancha de labial: Puedes frotar un poco de vaselina, tiza o pasta dental blanca. Dejas actuar unos minutos y enjuagas.
Mancha de sudor: Mezcla bicarbonato de sodio y limón, frótalo en las áreas afectadas de la ropa.
Sumado a estos tips se encuentra el siempre útil que las abuelas usaban:
Enjabonar la prenda con jabón azul de barra y ponerla al sol. Se puede agregar un poquito de agua oxigenada para mantener las prendas blancas bien lindas.
Esperamos que te sean útiles estos tips y que compartas con tus amigos.
Debe estar conectado para enviar un comentario.